Carta de presentación

Me llamo Javier Blanco, tengo 28 años y vivo en una ciudad situada al noroeste de España llamada León que cuenta con aproximadamente 120.000 habitantes en cuanto a población se refiere.

En términos meramente académicos, decir que cuento con la titulación de Técnico Superior en Educación Infantil así como la acreditación pertinente para trabajar como monitor de Ocio y Tiempo libre. Así mismo me considero un apasionado del deporte y la actividad física y considero que los valores que provienen de esta materia son necesarios a la hora de trabajar con niños y en el proceso de enseñanza-aprendizaje.
Creo que algunas de las características más positivas que poseo son la naturalidad, la sencillez, la cercanía y empatía y el trabajo en equipo. También me gusta mucho socializar, conocer nuevos puntos y visiones de vida y disfrutar viajando en compañía de amigos y gente cercana.

Una de las experiencias vitales que más me ha marcado ha sido mi estancia en un pueblo italiano del mar Adriático conocido como Magliano di Tenna. A dos kilómetros prácticamente de esta localidad se situaba Caparuccia, que era el lugar en el que tuve la oportunidad de desarrollar mi labor como educador infantil. Otro de los momentos que considero cruciales a la hora de determinar mi interés y gusto por la cooperación, la ayuda, la educación en valores tuvo lugar en el verano del 2017 con el viaje realizado a un pequeño pueblo finlandés llamado Suintio en el que interactué con la gente autóctona del lugar y realicé ciertos trabajos beneficiosos para la comunidad. Fue un espacio de trabajo en el que diferentes chicos y chicas procedentes de varios países del mundo, pusimos en prácticas todos y cada uno de los recursos y herramientas de trabajo posibles para desarrollar labores sociales con niños refugiados.

Así mismo, en octubre de 2022 me surgió la posibilidad de realizar un curso intensivo de alemán en la ciudad de Málaga con la finalidad de adquirir un puesto de trabajo en Alemania de educado infantil. Fueron 4 meses de estudio y formación partiendo desde un conocimiento nulo del idioma hasta la adquisición de un B1, que es el nivel de idioma necesario que se exige desde las autoridades alemanas. Mi estancia en Alemania como educador infantil contó con 6 meses de actividad, dentro de los cuales trabajé en dos escuelas infantiles distintas desarrollando mi labor de esa manera con niños de la rama de 3 a 6 años.

En la actualidad me encuentro trabajando como educador infantil en Park Academy Childcare Beacon Court de Sandyford, en Dublín (Irlanda).

En resumen, creo que puedo ser una persona que se adapte a la perfección a las condiciones y requisitos fijados dentro de esta estructura de trabajo, ya que me encantan los retos, me siento cómodo saliendo de la zona de confort, me apasionan los idiomas y me manejo bien a la hora de la resolución de conflictos o bien para afrontar situaciones complejas dentro de un aula. El modelo educativo desde mi punto de vista se basa en un proceso de seguimiento, evaluación e impronta personal del educador, que haga posible formar y educar a las nuevas generaciones del futuro que tendrán que determinar si la sociedad gira en un rumbo o en otro.